Ya es el tercer año que doy el “grito” lejos de mi país. La verdad no soy muy patriota, ni me agrada eso de hacer honores a la bandera, mucho menos alabar a los héroes que nos dieron "patria", pero créanme que estando lejos de México todo aquello que acabo de comentar te pone la piel chinita, te llenas de orgullo de ser mexicano y para ser sincero me sentía hasta con un toque de sentimentalismo. La fiesta inicio a las 2 de la tarde con una buena taquiza, siguieron las bohemia y los tequilitas para terminar con mariachi loco dando el grito entre mas paisanos.
Viviendo en culturas muy diferentes a la mia es cuando me doy cuenta de todas aquellas cosas que van más allá de las cosas malas de mi país y aprendo a valorar todas aquellas costumbres que nos identifican. En mi país todos somos orgullosamente mexicanos, llevamos el nopal tatuado en la frente y a donde quiera que vamos cargamos con nuestra bandera, esa bandera Verde de esperanza, Blanco de unidad y Rojo por la sangre derramada, son los colores de mi pueblo y de mi corazón. Su escudo basado en una leyenda azteca que cuenta como su pueblo vagó por cientos de años en el territorio mexicano buscando la señal indicada por sus dioses para fundar la ciudad de Tenochtitlán (la actual Ciudad de México), donde vieran a un águila devorando a una serpiente.
Resulta un poco ilógico celebrar nuestra independencia en España, pero mas allá de lo que paso hace 200 años, ahora esta fecha solo es un simbolo de union entre mexicanos y un fecha de celebración que nos recuerda que somos un país con una historia envidiable.
Por eso y mil razones más solo me resta decir:
“QUE VIVA MEXICO CABRONES!!!”, porque como México y su gente no hay dos…
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